Una nueva edición de testimonios de trabajadores, de profesionales, pero sobre todo de personas que han puesto lo mejor de sí para adaptarse a los cambios que les ha impuesto esta crisis sanitaria. Son historias sencillas, que transmiten honestidad y que no pueden si no inspirar empatía y muchas veces nos identifican, en medio de una cotidianeidad que está lejos de ser como algún día la imaginamos.
Carolina Morales – Supervisora de Medios – ZENITH OPTIMEDIA
Para mí el teletrabajo ha sido una experiencia súper positiva, no he tenido problemas, todo lo contrario, no invertir tiempo en traslados incómodos es muy agradable, mejoré la alimentación lo que para mí es importante porque tengo varias restricciones alimenticias y muchas veces en la oficina no alcanzaba o no podía almorzar. También puedo optimizar el tiempo en casa, por lo que particularmente encuentro solo cosas positivas para mencionar.
La forma de relacionarnos con el equipo ha tenido cambios para mejor, se mantiene siempre el estar atentos y disponibles, entregando feedback de sus tareas asignadas, pero creo que en este periodo incluso nos hemos unido más. Al no vernos todos los días, existe mayor preocupación por cómo está el otro y cómo ayudar cuando hay tiempo libre.
Soy una persona que se adapta a los cambios laborales y me inclino por respetar los tiempos en todos los sentidos. A diferencia de muchas personas con hijos, me resulta fácil conciliar ambas cosas, ya que cuento con una “mini oficina” tan buena como la de la Agencia -creo que ese es un punto muy importante-, por tanto, espacio y tranquilidad para trabajar.
Me encantaría mantener 100% el teletrabajo, creo que ha quedado demostrado que el rendimiento no ha bajado, al contario, y que en muchas ocasiones no es necesario estar en la oficina.
Cristhian Dittus – Planificador de Medios – ARENA MEDIA
Siento que el teletrabajo es un fenómeno algo extraño ya que a pesar de que muchas marcas contrajeron su actividad, la sensación de trabajo es igual o mayor que estando en la Agencia, quizás porque cliente piensa que bajo esta modalidad eres 24/7 y pide cosas con mayor inmediatez.
La forma de relacionarnos en equipo también cambió, antes el compañero se encontraba al lado y ante cualquier duda tenías un retorno inmediato, pero ahora los tiempos de respuesta son un poco más lentos aunque igual de efectivos, y con la ayuda de diferentes tecnologías es prácticamente lo mismo que si estuviéramos de manera presencial.
Si hago un balance, en mi caso la experiencia global ha sido sumamente positiva ya que si bien la carga laboral es la misma o mayor, la posibilidad de manejar tus tiempos, siempre cumpliendo con los objetivos, te da la libertad de hacer cosas que estando en la Agencia no podrías. Personalmente no tengo hijos, así que no hay problema si necesito enfocarme en algo puntal, y ha sido positivo en términos de pareja ya que nos ha permitido pasar mayor tiempo juntos.
Si se mantiene o no este sistema es algo que he hablado con gente del rubro y la opción general es que resulta bastante cómodo, lo ideal sería juntarse una vez a la semana a ver pendientes y el resto operar con teletrabajo siempre y cuando esto no repercuta en la remuneración.
Maricela Pastene – Directora de Estrategia y Producto – INITIATIVE
Antes de la pandemia teníamos motivos para querer trabajar desde casa, mayor productividad por menor tiempo de traslado, calidad de vida, etc. Sin embargo, este ensayo no ha tenido el diseño óptimo que quisiéramos y para los que somos padres, compatibilizar el trabajo con roles domésticos y ser padres/profesores full time, ha puesto a prueba habilidades claves para enfrentar cambios drásticos y salir psicológicamente fortalecidos, como la paciencia, el autocontrol y la organización.
Laboralmente el cambio ha sido más de forma. Toda la relación se basa en llamadas y videoconferencias que antes eran reuniones presenciales o una visita al puesto de trabajo del otro. Sin embargo, la tecnología y accesibilidad nos han permitido desarrollar el trabajo en forma efectiva, nos mantenemos en comunicación permanente, con el equipo de IT, y nuestra network regional y global apoyándonos.
Hace 10 años vivo fuera de Santiago, lo que me ha mantenido viajando para estar en la oficina y haciendo algunos días de teletrabajo en la semana. Esa experiencia ha sido invaluable para enfrentar este cambio desde lo positivo. No me detengo a pensar en lo negativo, mantengo mis horarios y responsabilidades diarias con energía y gratitud por aquello que tantas veces lamentaba no tener. El rol de heroína genera una presión y auto exigencia poco saludables y por salud mental prefiero soltar algo.
Creo que si a todas las herramientas tecnológicas le sumamos organización laboral y una legislación clara, compatibilizar jornadas presenciales y remotas sería beneficioso para la productividad y calidad de vida de todos.
En la próxima edición conoceremos los testimonios de Soledad Rallo de GroupM, Javier Bustos de BPN, y de Constanza Vargas de Forward Media.